LA JUSTICIA QUE MIRA Y NO VE…
Hace unos meses me vinieron a ver unas trabajadoras de albergues transitorios desesperadas porque su empleadora no les abonaba los salarios. Decidí encarar un proceso de amparo después de haberlos requerido al Ministerio de Trabajo, Telegrama Laboral y demás recursos. Estuvieron de acuerdo así que iniciamos el camino, que a la fecha podemos decir que es cuanto menos farragoso. Sumado a las incontables intimaciones por cuestiones formales a las que fuimos intimados (pandemia de por medio claro está), una vez que acomodamos los tantos, S.S. decidió (para garantizar certidumbre… Si de la verosimilitud en el derecho ni noticias…) oficiar a todas las entidades bancarias donde se acreditan los salarios de las trabajadoras. Y así estamos más de un mes y medio después transitando esta desventura sin ver la luz al final del túnel que alguna vez pronosticó una vicepresidenta…
TENGASE PRESENTE
Esta es la frase mortal que acompaña a muchos de les abogades en su tarea diaria. Es el famoso “téngase presente” o quizás el más sofisticado “hágase saber”. Y uno se pregunta cuando realizó una concreta petición y le contestan con el “téngase presente” qué “futuro” tendrá ese expediente y las esperanzas de su cliente cuando verifica que luego de un prolongado lapso, esa es la única respuesta. Ni decir del “hágase saber” donde uno se pregunta también a quién habrá que hacérselo saber para que se mueva el expediente.
APLAUSOS Y GARRAPIÑADAS
El colega tenía que presentar el escrito en forma virtual, obviamente….Y con desesperación ve que el sistema no funciona (aunque usted no lo crea). Ante ello envía un mail al Juzgado informando de la situación y pidiendo que se lo autorice a presentarlo el día posterior. Así lo hizo e inmediatamente el Juagado de Trabajo Nro. 15 le hizo lugar a la presentación. Por supuesto que corresponde….por supuesto que es lo correcto, pero vio….no se da todos los días con la eficiencia y premura que es de esperar.
CIFRAS QUE SIGUEN ESPANTANDO
Una profunda lágrima propia de esta Sección. El INDEC informa que hay 40,9% de pobres en nuestro país y 56% de menores pobres. Por supuesto que estos porcentajes no nacieron hoy y vienen en un grave ascenso desde hace varios años, pero espantan. Sabemos lo que significa ser pobre en esta tierra y sabemos que estructura de personalidad y desarrollo intelectual pueden llegar a tener esas y esos menores que no acceden a las necesidades básicas.
HISTORIAS DEL CORONAVIRUS
El veterano colega luego de ingentes esfuerzos, logra ingresar al ZOOM con la alegría del brillante éxito que había conseguido. Se contacta con el conciliador y la colega y comenta las vueltas que tuvo que dar para poder entrar en la reunión. Por si algo faltaba, llega a un acuerdo muy razonable, por lo que la felicidad era casi completa. Allí el conciliador le informa que tiene que imprimir el acuerdo, firmarlo, luego reingresarlo al sistema, escanearlo, subirlo a PDF y reenviarlo. A medida que le explicaba cada paso, el colega transpiraba y, debo decirlo, entraba en pánico, pues a lo sumo imprimir y firmar le resultaba familiar, pero todo el resto…. Conclusión anotó todo en un papel y llamó a su hijo para que lo hiciera, viendo como aquel logro inicial se esfumaba en los vericuetos de la tecnología.