Norita presente, ahora y siempre

Este número de la Revista tiene características particulares, dado que se compone de sus habituales secciones, más una sección especial dedicada a la nueva legislación laboral que intenta destruir en buena medida los derechos de las y los trabajadores. La tapa, como no podía ser de otro forma, está dedicada a rendir homenaje a nuestra querida socia honoraria NORA CORTIÑAS, cuyo fallecimiento hemos lamentado recientemente.

Y en sintonía con ello, esta Editorial está conformada por varias editoriales que en algún punto se cruzan y nos convocan.

La primera de ellas se refiere al recuerdo y, especialmente, a la permanencia de nuestra heroína, NORA CORTIÑAS, la querida NORITA. Su ejemplo de lucha, coherencia y defensa irrestricta de las mayorías sociales en su búsqueda incesante de los 30 mil, estuvo siempre enmarcada en su permanente sonrisa y alegría ante la tragedia, con su puño en alto y sus frases finales infaltables en todas sus intervenciones: “POR LOS TREINTA MIL DESAPARECIDOS, PRESENTE, AHORA Y SIEMPRE, AHORA Y SIEMPRE, HASTA LA VICTORIA SIEMPRE. VENCEREMOS!!!.

Y es allí donde se cruzan las editoriales de hoy. NORITA representa la lucha contra un régimen opresivo que pretende explotar cada vez más a las mayorías sociales para obtener más y más ganancias. La profusa legislación denominada protectoria que ha regido nuestra materia desde su nacimiento, y que ha incorporado la perspectiva de los Derechos Humanos de las y los trabajadores a partir de la reforma constitucional de 1994 es ignorada y aquella que aún rige en la práctica, es también violentada por la normativa que se pretende imponer, en buena parte con el silencio y complicidad de sectores que debieran oponerse severamente a su vigencia.

Claro ejemplo de ello lo constituye el art. 116 vigente de la Ley de Contrato de Trabajo que establece que el salario mínimo vital “es la menor remuneración que debe percibir en efectivo el trabajador sin cargas de familia, en su jornada legal de trabajo, de modo que le asegure alimentación adecuada, vivienda digna, educación, vestuario, asistencia sanitaria, transporte y esparcimiento, vacaciones y previsión”.

Si bien su inobservancia lleva ya muchos años, resulta evidente lo mucho que se agrava a partir de las medidas adoptadas por este Gobierno de barbarie. El hambre, la desocupación, la desprotección total en salud, la educación, la vivienda y la total eliminación de todos los conceptos que se detallan en el referido artículo, son hoy la intención que se materializa tanto en el DNU 70/23 como en la llamada Ley de Bases sancionada por el Congreso Nacional pero de cuestionable constitucionalidad.

Y allí, como en cada lucha, renace NORITA, y junto a ella todas las personas que han decidido enfrentar este régimen de exclusión que aumenta día a día la desigualdad social.
Norita, como inspiración y faro de reconocidos colegas que plantean cuestiones fundamentales referentes a la barbaridad jurídica que se pretende imponer,en contraposición con nuestra propia Constitución Nacional y con principios fundamentales de nuestro ordenamiento social y jurídico, con la clara finalidad de destruir los derechos humanos de las y los trabajadores.

Los diversos análisis contenidos en este número abarcan desde la inconstitucionalidad de la Ley de Bases, en su capítulo IV, relativo a nuestra materia, y de cada uno de los institutos que ella regula: el llamado período de prueba, la tercerización nuevamente vapuleada, la liberación del despido para los empleadores, la eliminación de las indemnizaciones agravadas para personas no registradas, la absurda figura del “colaborador”, la precarización extrema del empleo público, el trabajo agrario, la absoluta limitación y castigo al ejercicio del derecho de huelga, la cuestión previsional, el impuesto a las ganancias. Todo con el mismo propósito de atacar a la única “casta” real que reconoce este Gobierno: las y los trabajadores.

Por ello, incorporar esta Sección en este número de nuestra Revista, nos parece central en esta etapa, dado que además del aporte doctrinario, pretendemos brindar herramientas jurídicas a los colegas para incluir en sus presentaciones judiciales y en el ejercicio de la defensa de la clase trabajadora víctima de esta nueva regulación precarizadora, con la convicción de que la respuesta del Poder Judicial deberá ser la que restablezca la adecuada protección de los Derechos Humanos de las personas que trabajan.

Somos conscientes que esta lucha por lograr condiciones dignas de trabajo y de vida para las y los trabajadores a las que este Gobierno se empeña en destruir no se logrará solo con presentaciones judiciales, y que, tal como la historia ha demostrado, la movilización social es el principal camino que los pueblos han tomado para obtener sus conquistas.

Pero también sabemos que todo aporte contribuye al objetivo final. Y que somos, las abogadas y los abogados laboralistas quienes debemos cumplir una función esencial en la denuncia y esclarecimiento de que la normativa que se pretende imponer viola y degrada la condición humana y asesorar a nuestros representados y a sus organizaciones sindicales, en tal sentido. Todo ello en pos de esa transformación social que forma parte de nuestro ideario.

Este fue el sentido que hemos querido darle a este número de la Revista que reúne el material habitual, esta Sección especial y el homenaje y la presencia permanente de nuestra y de todas y todos, NORA CORTINAS, NORITA.